Design thinking y la estrategia de negocio
Por: Luis Fernando Osorio
Abril 9 de 2020
Consultor experto en Supply Chain, Lean Management, Lean Six Sigma, Lean Construction | LSSBB | CLTD | Scrum Master | MBA | Ingeniero Industrial | Kaizen Leader | Experto Lean | Design thinker
El Design thinking ayuda a las organizaciones y negocios a realizar sus procesos de innovación de forma sistémica, guía en la creación de ideas y en el desarrollo de soluciones. La gestión se diseña, pero en el marco de la dirección no se exige solo creatividad, sino el desarrollo de límites y controles que eviten los errores. La forma de gestionar ha evolucionado, y Design thinking brinda las herramientas para afrontar estos cambios innovando.
¿Qué es Design thinking?
A finales de la década de los 80’s la Universidad de Stanford desarrolló lo que conocemos como Design thinking. Creó su escuela de diseño (d.school) y desarrolló diferentes casos prácticos donde aplicó y fortaleció con la experiencia el proceso metodológico. Hay diferentes versiones de las fases a seguir en Design thinking, la más usada es la de la escuela de diseño de Stanford University, en la qué se basa el gráfico a continuación.
Son muchas las aplicaciones de Design thinking que se han logrado a largo de los últimos años en diferentes áreas de negocios. No solo es aplicable al desarrollo de nuevos productos, como en un principio se hizo, sino también en el diseño de estrategias de gestión en las organizaciones. Es en el ámbito del desarrollo de estrategias, que Design thinking se convierte en una herramienta con excelentes resultados.
El antes y después de la estrategia con Design thinking
Hay algunos paradigmas de la gestión de las organizaciones que han cambiado en el presente, y donde Design thinking ayuda a generar soluciones a través de su proceso. En el siguiente gráfico se puede observar el cambio de paradigmas al que las organizaciones se enfrentan hoy en día (Basado en: Motee, Idris. 2013. “Design thinking for strategic innovation: John Williy and Sons, Inc. Haboken, New Jersey. Pág. 22)
Mediante el proceso de Design thinking, se logran espacios de innovación que pueden ser claves para la generación de soluciones y finalmente de estrategias para los negocios. Generalmente, la gestión tradicional permite que la crisis absorba toda la energía, en algunas ocasiones toamndo malas decisiones debido a los ambientes estresantes y de altísima presión. Cuando se abren espacios de diseño para la solución de problemas, se logra ordenar la intervención en etapas claras, se consigue enfoque, y se gana en la experiencia probando prototipos hasta lograr madurar una contramedida final. Durante este proceso, se logra apuntar hacia donde se necesita y se evita trabajar primero en temas no tan relevantes para la situación actual.
Principios del Design thinking
Las interacciones que se llevan a cabo dentro de los equipos de trabajo se ordenan a través de Design thinking, el enfoque multidisciplinario obliga a desarrollar diferentes habilidades que se generan considerando algunos principios (Motee, 2013):
- La orientación a la acción: Actuar para aprender
- Estar a gusto con el cambio: Disruptivo, proponer nuevas formas de hacer las cosas.
- Centrado en el ser humano: Las necesidades del cliente, conocidas o no.
- Previsión integrada: Explorar las incertidumbres.
- Proceso constructivo y dinámico: Se repite el proceso, itera lo necesario.
- Fomenta la empatía: Ponerse en los zapatos del usuario.
- Minimizar riesgos: Fracasar mientras se prueba brinda un enorme aprendizaje que evita fallar en la puesta en marcha definitiva.
- Crear significado: storytelling, mapas, maquetas, etc.
- Llevar la creatividad empresarial al siguiente nivel: Cultura de cuestionar, frecuente reflexión, significado visual, interacción, inspiración y sensibilidad.
- Lógica competitiva de la estrategia empresarial: Ventaja competitiva por medio de la innovación.
Diseñar experiencia
Design thinking es sin duda una manera de pensar de trabajar, innovar y crear, se ha convertido en una referencia a la hora de conseguir resolver problemas, diseñar estrategias, crear procesos innovadores y disruptivos, crear cultura organizacional, desarrollar equipos de trabajo eficientes y orientados al logro, crea espacios de creación donde la comunicación y la expresión reinan, y se enfoca en lo que el cliente necesita.
Es sin duda una metodología moderna y ganadora, que busca la mejor experiencia para nuestros clientes y usuarios de los bienes o servicios que producimos. Design thinking aborda muchos problemas que tienen a las personas como su centro. Requieren un enfoque creativo, iterativo, práctico y centrado en las personas para hallar las mejores ideas y soluciones definitivas. El design thinking es precisamente ese tipo de enfoque de la innovación (Brown, Tim. 2008. Ideo.com).
